San Miguel de Abona
Un poco de Historia
La historia de San Miguel de Abona se remonta a la época aborigen, como así atestiguan los numerosos yacimientos arqueológicos hallados en su territorio. Hasta antes de la conquista castellana, a finales del siglo XV, esta demarcación perteneció al llamado Menceyato de Abona, uno de los nueve reinos guanches en los que se dividía la isla. Con la llegada de los europeos, San Miguel fue poblado por conquistadores, colonos y guanches. Hasta 1836 no se constituyó como municipio, estando bajo la jurisdicción de Vilaflor, aunque desde finales del siglo XVIII ya se habían dado los pasos necesarios para lograr la emancipación con la construcción de la ermita de San Miguel Arcángel y su elevación como parroquia en 1796. La economía del municipio siempre se ha sustentado en el sector primario, comenzando a desarrollarse el turismo a partir de finales del siglo XX.
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